Estas rosquillas se toman, como la tradición manda, para San Blas. Son típicas de estas fechas y tienen que estar bendecidas. San Blas es el patrón de los laringólogos y todo lo relacionado con las enfermedades de la garganta.
San Blas era conocido por su don de curación milagrosa: Salvó la vida de un niño que se ahogaba al trabársele en la garganta una espina de pescado. Este es el origen de la tradición de bendecir las gargantas el día de su fiesta, el 3 de Febrero, siendo costumbre popular invocarle particularmente para remediar afecciones de la garganta.
INGREDIENTES:
250 gr. de aceite de oliva virgen
500 gr. de harina tostada
150 gr. de vino blanco de mesa
1 copita de aguardiente
75 gr. de azúcar
1 sobre de levadura royal
Azúcar molido (glas)
Para tostar la harina se extiende sobre papel vegetal, sobre la bandeja del horno en una capa muy fina. Se hornea y cuando empieza a coger color, se retira
En el vaso poner el azúcar, el vino y el aguardiente y mezclar 4 segundo, velocidad 5. Incorporar el aceite previamente frito (que no este muy caliente). La harina tostada con la levadura. Mezclar 5 segundos en el 5. Amasar 3 minutos, vaso cerrado, velocidad espiga.
Una vez conseguida la masa, se toman porciones de 25 ó 30 gr. y se les da forma, que se unirán por las puntas. El rosco queda hecho.
Se van dejando los roscos en la bandeja del horno para después meterlos a cocer con el horno previamente caliente, a 180º. El tiempo de cocción es de unos 15 min., pero hay que vigilar por si hay que alargarla o acortarla (No hay que olvidar que la harina se ha puesto ya tostada en la masa)
Una vez fríos, se pasan por azúcar mezclado con azúcar glas. Al comerlos, se notará una textura floja y algo crujiente, es decir, hojaldrada.
500 gr. de harina tostada
150 gr. de vino blanco de mesa
1 copita de aguardiente
75 gr. de azúcar
1 sobre de levadura royal
Azúcar molido (glas)
Para tostar la harina se extiende sobre papel vegetal, sobre la bandeja del horno en una capa muy fina. Se hornea y cuando empieza a coger color, se retira
En el vaso poner el azúcar, el vino y el aguardiente y mezclar 4 segundo, velocidad 5. Incorporar el aceite previamente frito (que no este muy caliente). La harina tostada con la levadura. Mezclar 5 segundos en el 5. Amasar 3 minutos, vaso cerrado, velocidad espiga.
Una vez conseguida la masa, se toman porciones de 25 ó 30 gr. y se les da forma, que se unirán por las puntas. El rosco queda hecho.
Se van dejando los roscos en la bandeja del horno para después meterlos a cocer con el horno previamente caliente, a 180º. El tiempo de cocción es de unos 15 min., pero hay que vigilar por si hay que alargarla o acortarla (No hay que olvidar que la harina se ha puesto ya tostada en la masa)
Una vez fríos, se pasan por azúcar mezclado con azúcar glas. Al comerlos, se notará una textura floja y algo crujiente, es decir, hojaldrada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario